
Hoy se estrena en los cines la nueva película de Predator, aprovechando la ocasión es un buen momento para recordar la película que dio origen a todo y la que seguramente sea la mejor película de a saga, la original, la del “chuache”: Depredador.
La película nos narra la historia de un grupo de fuerzas especiales encabezado por Dutch (Arnold Schwarzenegger) que son contratados por la CIA para rescatar a un rehén capturado por la guerrilla en la selva centroamericana. Lo que parece a priori una misión fácil para este rudo comando se vuelve un infierno al ver como algo o alguien les va dando caza uno por uno. Y es que están en territorio de un depredador.
Magnífica, Depredador es sin duda uno de esos film de acción que gozan de muy buena calidad. La angustia e incertidumbre que desprende en todo momento está muy bien ajustada para que no sea ni corto ni excesivo. La historia es una excusa para ponernos en pantalla una auténtica lucha entre Arnold Schwarzenegger y el Depredador, un extraterrestre tipo alíen, con visión térmica, camuflaje óptico y un sinfín de armas. Utilizando como coto de caza la selva, el Depredador es un auténtico cazador en busca de su presa. Puede que nuestros amigos estén en desventaja pero Dutch es un tipo duro que no se asusta por nada, y ahí es donde Schwarzenegger lo clava, el papel le viene como anillo al dedo, con sus hipermúsculos y sus frases de tipo duro, cualquiera se mete con él, tampoco se quedan atrás sus compañeros donde encontramos de todo, desde el rastreador, el bestia con la ametralladora gatling (llamada la Impaciente), el graciosillo, el jefe de la misión, etc. Las continuas escaramuzas contra el alien son geniales, bien rodadas manteniendo la tensión en todo momento deseando ver qué pasa a continuación, se nota que el director John McTiernan es un experto en el género, aunque hay que decir que no está a la altura de la mítica Jungla de Cristal, a pesar de todo no se aleja tanto en cuanto a calidad. Esto unido a una buena banda sonora que te pone los pelos de punta en más de una ocasión nos dejan un film redondo para los amantes de la acción.

En definitiva, Depredador es un auténtico peliculón de acción, atemporal con un enemigo que ha dado mucho al cine de ciencia ficción y se ha convertido ya en un clásico, por desgracia su secuela y sus spin-off como Alien vs Predator o la última Predators (2010) no están a la altura del mítico film de John McTiernan, de lo mejor de los 80. Un film muy recomendado.
Frase favorita: -Te han dado, estas sangrando -¡No tengo tiempo para sangrar!