
Junto con Robocop y Starship Troopers, Desafío Total es de lo mejor que ha hecho Paul Verhoeven en su carrera como director. Creo que estas tres películas son un ejemplo de lo que se hacía en los ochenta/noventa en el género de acción. Violencia, acción cruda y escenas políticamente incorrectas, un puñetazo en el estómago a las pelis que se hacen hoy en día donde todo es happy, family friendly e inclusivo. Es imposible no pensar que antes se hacían mejores películas, por mucho que suene a tópico, pero es que es así. Y eso se puede ver con los remakes que se hicieron de Robocop y la propia Total Recall. Películas con mucha acción y efectos especiales pero totalmente descafeinadas.
La peli parte de la idea del relato de Philip K. Dick Podemos recordarlo por usted al por mayor, en ella Douglas Quaid quiere viajar a marte pero como es muy caro, acude al laboratorio Memory Recall donde le implantan unos recuerdos como si hubiera estado allí. Pero antes de que empiecen con el injerto, Quaid comienza a tener recuerdos de marte y de que él es un espía del líder Cohaagen.
Partiendo de esa premisa (y es que el relato solo es eso) la pelí abarca mucho más, nos muestra un mundo futurista propio de lo que imaginábamos en los noventa. Los coches no vuelan pero son autónomos, se ha colonizado marte y es aquí donde transcurre la mayor parte de la historia, Cohaagen, el hombre que gobierna marte explota a sus habitantes lo que genera revueltas como la del misterioso Kuato. Y entre medias está Douglas Quaid, un tipo aparentemente normal cuyo sueño es ir a marte, pero parece que todo lo tiene en contra. La peli hace algo muy bien que en el relato no se muestra demasiado, y es que nunca queda claro si lo que está viviendo Quaid es real o fruto de su imaginación por haber estado en Recall, por lo que nos hace dudar en muchas ocasiones, aunque al final se aclara, quizá hubiera estado mejor dejarlo en el aire. La ambientación es soberbia, ese futuro algo decadente y el diseño de marte son geniales para la época que se hizo, a pesar de que se le nota el paso de los años, sigue manteniendo una buena estética, son muchas las cosas que marcaron época, siendo la mujer de las tres tetas la más recordada por todos, pero había otras como el taxi robot, la cabeza robotizada de mujer, el chip rastreador, el propio aspecto de Kuato, que aquí en España nos recordaba un conocido político de la época -muchos chistes se hicieron al respecto-, la banda sonora cuyo tema principal se usaba en los partidos de la liga en el Canal+, etc. Son este tipo de pelis que marcan época sobretodo si la ves de pequeño como fue mi caso. Y por si todo eso no fuera suficiente, el protagonista es nada más y nada menos y nada más que nuestro querido chuache (Schwarzenegger). Ya sabemos todos las limitaciones que tiene como actor pero en esta ocasión el tío lo dio todo, mostrando una sobreactuación algo más cómica de lo que pretendía ser.

En fin, no puedo decir nada malo de está cinta, es una peli que me gustó mucho en su momento y me sigue gustando hoy en día, es más ahora hasta me gusta más ya que se sale de lo típico que se puede ver hoy en día donde todo está mucho más encorsetado y no se sale de unos estándares premarcados. Falta esa frescura que había antes y Verhoeven es uno de esos directores que no se corta ni un pelo en mostrarte lo que quiere. Un clásico de la ciencia ficción.