
Parece que DC sigue dando palos de ciego con sus películas y no vemos que encuentre el camino. Tras la muy criticada, y desde mi punto de vista no tan mala como decían, Batman v Superman: El amanecer de la justicia, nos encontramos con que Escuadrón Suicida vuelve a quedarse en tierra de nadie, y evidentemente con un sin fin de críticas a su espalda.
Tras lo hechos ocurridos en Batman v Superman y ante el temor de la aparición de nuevos y poderosos enemigos, Amanda ‘El Muro’ Waller (Viola Davis), la líder de la agencia secreta A.R.G.U.S., propone reclutar a los villanos más crueles, con habilidades letales e incluso mágicas, para que hagan el trabajo sucio en misiones suicidadas.
La peli no comienza mal, empieza con buen ritmo introduciéndonos a los personajes a modo de flashbacks y tal, que ocupa un buen cacho de la peli, pero cuando llega al momento que se supone que tiene que ser el punto álgido de la película se desinfla. Da la sensación de que se quedaron sin ideas y la peli se vuelve simple y monótona, es como si la estuvieran haciendo sobre la marcha, quedándose en un guión muy simple que no destaca en nada y que ya hemos visto en muchas otras pelis de acción.
Llegando a la parte de los personajes, que tendría que ser lo más importante junto a la trama, nos encontramos que salvo Harley Quinn y Deadshot los demás carecen de importancia y no sientes ningún tipo de interés hacia ellos. Por un lado a Will Smith y Margot Robbie le dan mucho protagonismo, siendo esta la que mejor sale beneficiada de la película, hay que reconocer que el papel de Harley Quinn le queda perfecto. Y Will a poco que haga ya encaja bien en el papel. Pero del resto, no sientes cariño, de hecho te importa tres narices lo que les pase. Por su puesto el personaje más polémico y el que más dará que hablar es el nuevo Joker. Está claro que el nivel que consiguió Heath Ledger en El caballero Oscuro iba a ser imposible de superar, eso ya lo teníamos asumido, y se vio claro que ya desde los primeros trailers el enfoque del Joker iba a ser muy distinto. En esta ocasión, el Joker ha quedado muy relegado a segundo plano, ha pasado a ser un matón de barrio con tatuajes y pelo estridente. Jared Leto no es que lo haga mal y seguramente este perfil de Joker encaja con la película, y esa estética gamberra y punk que le han puesto, pero claro, estamos hablando del villano más importante de DC y el más carismático, no hay comparación con el de El caballero Oscuro, ni siquiera con el de Nicholson, de hecho esta más cerca de las de Schumacher. Me ha sabido a poco, además sus escenas son mínimas y no mejoran la calidad del fim. Pero bueno, tampoco se podía esperar mucho si el nivel de la cinta tampoco destaca. Y si es cierto que han recortado escenas en las que salía él, pues no deja en muy lugar a la dirección, o lo hacen para sacarnos una versión extendida, tipo Batman v Superman para sacar más pasta, o es que las ideas no daban para más.
Pero eso sí, no todo es malo y hay que reconocer que la banda sonora es cojonuda, el acierto de los temas con la estética de la película son un gran apoyo en los momentos de gran acción, todo lo que suena son grandes temas conocidos y clásicos del música, en el trailer ya dieron cuenta de ello.
Al final, la peli se ha quedado en un ni fu ni fa, prometía algo nuevo alejado de la estética habitual de los superhéroes pero se ha quedado en tierra de nadie, no han sabido aprovechar el potencial que podrían haber tenido con esos personajes y el universo DC, y se ha quedado en una peli ligera que no destaca demasiado. Y con esta ya son tres películas que no están a la altura ni de DC ni de lo que se esperaba de ellas, mas vale que remonten con el estreno de La liga de la Justicia porque ahora mismo DC está en la cuerda floja, y a poco que haga Marvel se los van a comer vivos, bueno de hecho ya lo están haciendo.