
Space Jam: Nuevas Leyendas es hija de su tiempo, en los noventa la Space Jam original era divertida, entretenida y con el mejor jugador de NBA de todos los tiempos, aunque no te gustase el baloncesto sabias quien era Michael Jordan y lo que había hecho. LeBron James puede ser muy bueno y un sucesor espiritual de Jordan pero no tiene ese carisma, del mismo modo esta película tiende a sobrecargarse, algo habitual es las películas actuales del estilo family friendly, parece que hay que poner de todo un poco para contentar a todos los colectivos, grupos y tal, dejando a un lado la trama y los personajes, en esta ocasión LeBron tiene más protagonismo y diálogos que Jordan, y algo más de historia personal, pero para variar, Warner Bros. ha aprovechado para hacer un poco de publi de todo su catálogo, así que vamos ver escenas inspiradas en otras pelis de la productora como Matrix, Batman, Superman o Harry Potter entre otras, muy al estilo de Ready Player One, donde había referencias a otras pelis. Por lo que en ocasiones parece más que estemos viendo un spot de la compañía que no una peli, por no hablar del patrocinio de Nike, que está en todos los lados. Esto hace que de por sí la peli sea más que una peli, un producto, puro marketing orquestado por sus ejecutivos para sacar pasta, y esto es lo que la diferencia especialmente de la peli de los noventa, donde todo parecía más casero y más enfocado al entretenimiento, parecía más inocente, aunque el objetivo fuera el mismo.
La peli tiene muchos cambios con la original -como era de esperar-, antes los malos eran una raza de alienígenas que querían llevarse a los Looney Tunes a su planeta natal, ahora el malo es un algoritmo, una IA de un ordenador y como si de Tron se tratase, absorbe a LeBron y a su hijo para retarles a un partido de baloncesto como si de un videojuego se tratase, donde todo es mucho más caótico y frenético, dándole mucho más protagonismo al espectáculo, que al fin y al cabo es lo que más espera uno ver. El aspecto visual es algo llamativo y curioso, tenemos unos momentos donde vemos a LeBron como un personaje animado en 2D para posteriormente ver al grupo de Bugs Bunny y compañía en 3D, el CGI del que estamos acostumbrados, vamos lo que se lleva ahora. Quizá el modelado de los personajes de los Looney Tunes sea lo mejor hecho de la película, así como algunos gags que hay. Lo que no es mejor es la banda sonora trillada de hip-hop, se queda a años luz de la original.

Ahora entramos en las polémicas, la principal es la nueva versión de Lola Bunny, mucho menos sexualizada que en la original -aunque en la original tampoco es que tuviera gran cosa-, pero bueno su estética encaja perfectamente con la película. La otra es el doblaje al español de Lola Bunny, que en lugar de hacerla una profesional del doblaje la hace la cantante Lola Indigo, esto genera mucha controversia por la intromisión -muchas veces- de coger a famosos para doblar algún personaje animado para después poder hacer la promo. Independientemente de si el doblaje lo hace un profesional o un famoso, el caso es que el doblaje de Lola Bunny es una mieeeerrrr…. cero interpretación, cero emoción, cero carisma, encaja como el culo, parece que lo haya doblado desde un móvil sentada en el sofá de su casa, la verdad es que queda muy mal y desentona con el resto de personajes, parece un doblaje de videojuego cutre. Otro flaco favor que no ayuda a la película.
En definitiva esta nueva Space Jam está por debajo de la original, pero especialmente para los que vivimos la época de los noventa donde esa peli encajaba mucho mejor -como es lógico-, esta nueva encaja perfectamente con la época actual, la época del tik-tok, los influencers, las redes sociales y los ofendiditos, y las productoras saben muy bien hacer estudios de mercado para sacar hasta el último céntimo vendiendo la nostalgia, el gran problema de la industria actual.
