
Todos conocemos el dicho de que segundas partes nunca fueron buenas, y en la mayoría de ocasiones es cierta, pero por suerte de vez en cuando hay alguna excepción. Lo hemos visto por ejemplo con el Episodio V de Star Wars o con la segunda parte de El Padrino. Y Terminator 2 es una de estas. Seguramente habrá muchos que le guste más la primera, pero es innegable que esta segunda parte mejora en todo respecto a la primera. Y es que lo que en la primera fue una peli de bajo presupuesto y casi de cine b, en esta segunda parte tenemos un autentica superproducción de primer nivel. James Cameron ahora tenia el presupuesto necesario para hacer todo lo que quisiera, y lo que hizo lo hizo muy bien.
La historia sigue la misma premisa que la primera, en un futuro los humanos se enfrentan contra las maquinas, Skynet, la computadora que controla las máquinas, al ver su posible destrucción por parte de la resistencia humana, liderada por John Connor, decidió mandar al pasado a un Terminator para matar a la madre de John antes de que este naciera, como fracasó volvió a mandar un nuevo Terminator para eliminar al propio John cuando este era un niño, de la misma forma que en el pasado, la resistencia pudo enviar a un protector, en esta también enviarían a uno, la pregunta es ¿cual de los dos llegará antes a él?
Como vemos la idea de la película es prácticamente la misma que la anterior, un Terminator viaja al pasado para matar a alguien y otro que viaja al pasado para salvarlo. Podría parecer de primeras que hubiera una falta de originalidad pero Cameron ha sabido darle un estilo lo suficientemente distinto de la primera como para que esta segunda parte sea totalmente distinta. A diferencia de la primera, que era más oscura e incluso terrorífica, esta es totalmente una peli de acción, un autentico blockbuster con acción intensa, persecuciones, disparos y explosiones a raudales. Pero a diferencia de las pelis actuales esta tiene un buen guion, buenos personajes y lo más importante: personalidad propia. Terminator es una saga de renombre y conocida en todo el mundo, a pesar de que las únicas buenas sean las dos primeras, una peli adelantada a su época y con unos efectos especiales a la altura. La película a envejecido muy bien ya que la mayoría de efectos especiales son reales y el poco CGI que hay, a pesar de desentonar para lo que estamos acostumbrados hoy en día, cumple. De hecho, esta peli es una de las primeras en recrear completamente a una persona en CGI.

Arnold Schwarzenegger vuelve de nuevo a ser el encargado de interpretar al famoso T-800 y esta vez con más dialogo, la sorpresa vino de que en esta ocasión iba a ser el bueno de la peli, el que protegería a John Connor, una lástima que ya en esa época antes de estrenar la peli se supiera esto, ya que el impacto de ver que en esta el T-800 era bueno hubiera sido un buen giro de guion, o como dicen ahora un plot twist. Y si el T-800 ahora es el bueno ¿quién es el malo? Para ello Cameron optó por un modelo mucho más avanzado, el T-1000, un Terminator de metal líquido capaz de modificar su apariencia, crear cuchillos y objetos punzantes, y correr cual Usain Bolt. Como diría el propio chuache es un prototipo más moderno, Robert Patrick es quien lo interpreta, convirtiéndose también en un personaje querido por el publico. Para el papel de John Connor se optó por un chaval que entonces no era ni actor, Edward Furlong consiguió su primer papel en esta peli y al momento se convirtió en estrella mediática, algo que le sirvió para futuros papeles como el de American History X, lástima que el chaval se fuera por el mal camino. Linda Hamilton también repite en el papel de Sarah Connor, donde la vemos como una de las mejores tipas duras que ha dejado el cine junto con la teniente Ripley de Alien.

Si la primera de Terminator fue una sorpresa, su secuela fue todo un éxito desde el primer momento, con un presupuesto de 100 millones de dólares, se convirtió en la segunda peli más taquillera de la época solo superada por ET. Obtuvo cuatro Oscars aunque todos técnicos, y consagró una saga que por desgracia no ha sabido continuar con el éxito generado. Aun así es una película obligada para todo cinefilo que se aprecie, ya que es una de las mejores películas que se han hecho en la historia del cine, llena de imágenes y escenas iconicas. Como curiosidad tiene una versión extendida y un final alternativo que mejor no lo hubieran rodado.